A los 95 años cayó la primera esposa de Fidel Castro, Mirta Díaz-Balart

La Habana/Mirta Díaz-Balart, ex esposa de Fidel Castro y madre de su primer hijo, falleció el sábado en Madrid a los 95 años. Fue su hijo, Fidel Alejandro Castro Smirnov, líder científico del régimen y residente en Cuba, quien dio la noticia en su décimo cumpleaños, asegurando que su abuela era una “gran mujer”, que brindaba la garantía “legal” de su país. no se rendiría. y su “extraordinaria historia”.

Díaz-Balart nació en La Habana en 1928 y se divorció de Castro en 1955. Se convirtió en miembro de una de las familias más importantes de la República. Estudié Filosofía y Letras en la universidad principal, donde conocí a Castro, quien estudiaba Derecho. Su luna de miel ardió en Miami y Nueva York en 1948 y un año después del nacimiento de su hijo, fidelitoquien se suicidó en 2018 debido a una fuerte depresión y por las circunstancias aún no ha explicado todo.

La familia Díaz-Balart tuvo –y todavía tiene– una fuerte influencia en la política. El padre de Mirta, Rafael José Díaz-Balart, era natural de Banes, pueblo holguinero de donde era originario Fulgencio Batista. Su hermano Rafael fue miembro del Parlamento cubano y, entre 1952 y 1956, del gobierno; Estaba en medio de un intento fallido en el díptico Moncada, organizado por Castro, y lamentaba tener que aceptar la pérdida de sus amigos. Los hijos de Rafael, Mario y Lincoln –hijos adoptivos de Mirta– son los fuertes congresistas republicanos de EE UU.

Su esposa fue una de las pocas personas a las que se les permitió visitar a Castro en prisión. Al divorciarse, Mirta sigue a su propia esposa, no sólo por su actividad revolucionaria, sino por la infidelidad de su marido a la famosa Naty Revuelta, también por su marido, quien le dio una hija a Castro: Alina Fernández.

Castro y Mirta están separados no sólo por su actividad revolucionaria, sino por la infidelidad de su marido con la famosa Naty Revuelta.

Tras el divorcio, Díaz-Balart viajó a México para hacerse con la custodia de su hijo, a quien encontró con su padre exiliado. Castro no volvió a tener contacto con el niño hasta 1959. Esto volvió a suceder en 1956, con Emilio Núñez Portuondo –hijo de un embajador de la República– con quien tuvo varios hijos. Se fue a España con su nueva familia, tras la muerte de Castro, pero dejó a su hijo Fidel en la isla.

Una de sus hijas de su segundo matrimonio, Mirta Núñez Díaz-Balart, actualmente directora de la Biblioteca Conmemorativa Histórica de la Universidad de Madrid, ha hablado en varias conversaciones de cómo ha explicado su biografía en diferentes ocasiones. La hijastra de Castro. Se trata de un estudio crítico del dictado de Franco en España y fue el impulso para elaborar una lista política de nombres de calles que evocan al legendario francés, con el objetivo de cambiarlas.

En una de las conversaciones que mantuvo Núñez Díaz-Balart se decía que su madre vivía en la calle Alonso Cano de la capital española y que su padre era un ardiente anticastrista. Durante uno de sus viajes a Cuba, en 2006, el investigador recibió una llamada de su hermanastrologer Fidelito, quien le informó sobre la delicada operación en la que el dictador se quedaría un tiempo este año y perdería la vida sin el envío de un policía. oficial. los servicios sanitarios de la Comunidad de Madrid.

“Viajó varias veces a La Habana para estar con mi hijo, pero igual fue para ver si podía hablar con Fidel”

La propia Mirta Díaz-Balart fue interrogada a través del diario El mundo tras la muerte de Castro en 2016. “Viajó varias veces a La Habana para estar con mi hijo, pero de todas formas fue para ver si no podía hablar con Fidel”, dijo entonces. Dijo que se había sentido “despedido” por el aflojamiento de su cráneo y había registrado su matrimonio como “algo que no tengo” desde su “juventud”.

En el olvido por su defensa y posterior suicidio, se incluyen en el apartado oficial los nombres de Fidel Ángel Castro Díaz-Balart y su madre. Sólo su primo Castro Smirnov, profesor de Ciencias Físicas Nucleares en La Habana, ha recurrido al diario de X para releer la historia de su familia, mientras su abuela, como su padre, niega su “confianza” en Fidel Castro.

Por ejemplo, Castro Smirnov publicó muchas fotos de personas que veían a Mirta como su padre, como una especie de protagonista familiar, pero no con Fidel, sino con su hermano Raúl, quien -como él dice- organizaba las visitas de Mirta a la isla y presentaba ellos en los medios. los esporádicos se encuentran con la cola. En las fotos de familiares que no han sido publicadas por nadie, fue Raúl y no su hermano quien asumió el papel de padre.

Castro Smirnov publicó muchas fotos de Mirta, quien desempeñó un papel protagónico en una familia como su padre, pero no con Fidel, sino con su hermano Raúl.

El “desdichado pastor” de Castro fue encontrado en una cúpula de granito oscuro, de color vino tinto, sobre un lienzo mantenido por la Academia de Ciencias de Cuba, después de leer recientemente este diario. Castro Smirnov recogió los “contactos” de su familia con el ejército de Castro y lo sacó en defensa de su vigilancia “física”, de su “poder (más fuerte que las fuerzas nucleares)”, respirando “el dinamismo de Fidel, el viento de Fidel, la luz de Fidel (la más bella). y más fuerte), el movimiento de Fidel, el magnetismo de Fidel”, todos siguieron a la joven ciencia, “perdieron” más en la muerte, pero “todo es físico”.

Un mensaje similar – “su fin no es la muerte” – fue pronunciado por Mirta Díaz-Balart el sábado.